NO TODO ES POESÍA PERO PARECE

martes, 2 de diciembre de 2008

¿hasta donde con la tecnología? // Mariano Cantoral


Post escrito mientras escucho:

"¿quién me ha robado el mes de abril?
¿Pero cómo pudo sucederme a mí?
¿Quién me ha robado el mes de abril?
Lo guardaba en el cajón
donde guardo el corazón"


Joaquin Sabina


Actualmente, nadie puede declarase ajeno al mundo tecnológico que nos copa en toda las áreas de la vida, desde que nos despertamos-damos rienda suelta a la rutina- hasta que nos dormimos (para empezar de nuevo) hay incontables elementos, aparatos o máquinas que nos facilitan la ejecución de actividades cotidianas.

La computadora, es vista comúnmente con la cabeza fría (como si no fuera algo extraordinario)es menester realizar una labor reflexiva acerca de los beneficios contundentes que conlleva su existencia, así como el complejo universo de tecnología que le da vida a este aparto (chips, microchips etcétera) y ni hablar del Internet, increíble, todos creen imposible la teletransportación pero esto es el precisamente el Internet: “teletransportación” -estar aquí, estar allá al mismo tiempo- ¿acaso no es posible?

Y es timorato negar que hoy por hoy el tener computadora con Internet es indispensable (para paliar el uso de técnicas anacrónicas y lentas de trabajo). Que a pesar de ya no ser un lujo sino una necesidad (subjetiva), si es un lujo entendido semánticamente lujo como algo al alcance de un grupo élite (complejo).

Es dable entonces preguntarnos con toda la filosofía que supone dicho cuestionamiento ¿hasta que niveles la máquina va a reemplazar la mano y la mente humana? ¿Qué va a suceder cuando los robots puedan realizar todas las labores que hoy ejecuta un ser humano? Pero sobre todo ¿Qué va a suceder cuando se popularicen? ¿La compra de un robot va a ser el único pago-salario para esa chatarra? ¿Qué vamos a hacer con los obreros que todos somos?

Resulta retórico, pomposo y discursivo dogmatizar que la máquina fue hecha por el hombre y por eso jamás será superior a el, pero que tal si el mundo del cine otra vez, funciona como profeta y nos va sucediendo lo del la película gringa, “TERMINATOR: LA REBELION DE LAS MÁQUINAS”.

Parece insensata la analogía pero un hombre no es capaz de rellenar, embasar, empacar a la velocidad de una máquina millonaria (otra vez pisto de por medio) ¿no el alumno está aventajando al maestro? ¿Podremos detenerlo? ¿Qué tanto debemos permitir el vertiginoso avance de la tecnología? ¿La tecnología deshumaniza?

Caterva de preguntas que solo dejo en el viento para promover un ejercicio filosófico y lógico, para nada automatizado como la vida ahora, donde ya no se visita, se llama por cel, ya no se pone leña, se pone en el micro, ya no se contrata personal de empaque, se manda a traer una empacadora gringa, donde ya no se muere, se inyecta vida de mentiras (eutanasia). Esto por mencionar algo de lo más común que ha monoploizado la tecnología.

La tecnología dentro de su maraña de beneficios, emana ciertas paradojas que solo el tiempo y su dialéctica podrán dar respuesta, ¿acaso la tecnología colisiona con el resguardo del medio ambiente o la garantía de la vida misma?, o más radical ¿Qué vale más, un árbol, un ser humano o una laptop?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

as always
yOu are briilliiant !!!
take care,
hugs and kiisses

Renato dijo...

"cuando ya no queda más que mejor que la lluvia y entrar en cualquier bar y pedir un martiní y volver a marchar sin haberlo acabado"
SABINA

P.D. Por romanticista que parezca, siempre más un ser humano, carajo, siempre.

Saludos
R.G.C.H.